Visitas: 181
——————————-
Pueblo chico, elecciones grandes
——————————-
DEMOS CRACIAS
Por Verónica Rossi
——————————-

Demos Cracias Humor a la Wargon
——————————-
Pasillo Largo. Nada tiene de original el nombre una vez que se sabe que es una cinta de cinco kilómetros de largo por trescientos metros de ancho. Tres calles paralelas, la central asfaltada y las otras dos de mejorado.
Vivir en Pasillo Largo es agradable. Extraño para los que vienen ocasionalmente, pero agradable.
¿Qué es lo que hace tan atractivo este lugar? Justamente eso, que es extraño, a veces impredecible, siempre excéntrico y, a su modo, rutinario.
En la Plaza de la Memoria, por ejemplo, el ferretero, a la siesta, cuenta la historia del pueblo. Nos recita la letra del himno, nos lleva de la mano a la mitológica fundación, nos relata las gestas de los próceres locales. Al salir de la Plaza olvidamos todo. Por suerte tenemos nuestra bandera, indeleble hasta para el más distraído.
Es pueblo de escultores. Eso sí, las obras que realizan no se exhiben, se guardan prolijamente bajo tierra. Es lo que nos permite tener el polideportivo sobre el museo, invisible pero siempre presente. Nuestro legado para futuros arqueólogos.
Nos gusta la pesca, no tenemos río o arroyo, ni siquiera un ocasional bañado tras las lluvias, de hecho nunca llueve. Eso no nos desanima. Hay pescadería, piolines y totoras, con eso podemos dibujar el resto.
También nos gusta la caza deportiva. Ocurre que nos rompería el corazón matar animales, por eso usamos arcos de iris y flechas de colores. Los relatos de hazañas de cacería nos encantan por eso, las presas pueden ser enormes o huidizas, todo depende de nuestra habilidad para relatar.
Es larga la lista de nuestros placeres, pero el que sobresale es nuestro gusto por las elecciones. Únicamente se comprende cuando te establecés aquí: votar se convierte en necesidad. Y en Pasillo Largo se complica. Menos para Expósito, él es inmune. ¿Inmune? Les explico.
En Pasillo Largo hay cuatro urnas, lugar pequeño como pueden notar. Y todos quieren participar como autoridades de mesa, hay fiscales de partidos que nadie conoce o que ya no existen. Lo importante es participar. Y hay autoridades no oficiales, suena raro, pero son personajes que aquí se consideran condimentos imprescindibles de cada acto eleccionario.
El más antiguo es El Dudador. Te acompaña los últimos metros hasta el Centro Cívico y pregunta interminablemente las razones del voto. Debe ser por su aspecto de sacerdote, o de gran autoridad, o el tono de su voz, pero uno duda. Mientras tanto, en la puerta del enorme galpón (no usamos las escuelas aquí, por respeto) te espera El Escéptico. Hasta ahora dudabas, pero cuando El Escéptico te habla, todo se te vuelve turbio y lejano.
Después el galpón se subdivide en espacios para las cuatro mesas. En ese momento ya todo es azar, depende de los Guías, los Asesores de Cuarto Oscuro o los Ayudantes de Voto que te toquen en suerte. Te pueden adjudicar a las Hermanitas Libinidosas por ejemplo. No importa tu sexo, ellas intentarán seducirte. Y lo van a lograr once veces de cada diez.
El Murmurador es atento e implacable. Es fiscal general y recorre constantemente cada mesa. Dentro del cuarto oscuro se lo escucha todo el tiempo. E hipnotiza. El sobre sale gordito con una boleta de cada candidato y hasta le cuesta entrar a la urna.
Peor aún es La Aparición. No hay nada irregular en que te acompañe en el cuarto oscuro, después de todo no existe. Tal vez. Se especializa en el voto en blanco. Al abrir la urna comprobaremos que todos los sobres están vacíos.
También están las Sirenas de Odiseo, que improvisan coros de naufragio. Te hacen arruinar el voto, quieras o no. El gerente del correo. por ejemplo, sale del cuarto oscuro gritando VIVA YRIGOYEN. Y ahí no más lo impugnan.
No es infrecuente que la gente no llega ni a entrar y anuncia “no hay boletas”. Los fiscales y autoridades de mesa se precipitan en auxilio del votante. La reposición suele tardar hasta un par de horas, todos saben de qué se trata y todos ejercen desconocimiento. La palabra orgía está muy mal considerada en Pasillo Largo.
Las elecciones en este lugar son y deben ser una gran fiesta, que se extiende al menos seis meses cuando nos organizamos. Sabido es el caso de una mesa en la que se demora el recuento desde 1983. Tenemos miedo de enviarla a la Justicia Electoral y que todo se vuelva normal, como en cualquier distrito.
Cuando Expósito se acerca a votar, el clima se transforma. Es que lo conocen como El Elector. Expósito es inmune a los conjuros de Pasillo Largo, por lo tanto su voto nunca es en blanco, ni nulo, ni impugnado.
Él no está enterado de la situación. Por eso en el pueblo estiman tanto su sufragio.
¿Cómo harían sin Expósito para tener autoridades?
——————————-
REVISTA A LA GORRA
Gorra de 1000 Gorra de 2000 Gorra de 3000
Para otros montos:
El alias de Mercado Pago es:
cristinawargon
El CBU Banco Nación es:
0110001330000104543129
——————————-
——————————-
Sitios amigos
I Ching el Pozo de Agua // Posicionamiento en Web // Mundo Freya
Caban Arquitectura // Cristina Wargon Humor
H&B Investigación Clínica y Estadística // Juana Molina
Sandra Mihanovich // Daniel Paz // Peroncho
Negro Fontanarrosa // demendiolaza